55 día de confinamiento horneado final del Bizcocho del Padre Pio paso a paso foto a foto

«Refrany; Si no fas bondats, aniràs al llit descalç» Si no haces bondades, irás a la cama descalzo.

Hemos llegado al 55º día de confinamiento oficial y tras diez días de preparación ¡¡¡por fin es viernes 9!!! tras todo estos días, ha llegado el momento de separar de nuestra masa las tres porciones que regalaremos, y de hornear nuestro especial bizcocho.

Esta fué mi primera publicación, con la que inicié este blog hace ya siete años, y he pensado que ahora es un buen momento para hacerla todos quienes queráis participar, al mismo tiempo, juntos y unidos, como un acto de unión, paciencia, buenos deseos, paz,  y esperanza.

Puede que os suene, ó hayáis oído hablar de éste bizcocho, pero por si acaso es explico de que va esto,como me lo explicaron al pie de la letra en un mail;

Según cuenta la leyenda, el padre Pío era un misionero que ejercía, hace muchos muchos años en Egipto y regalaba a sus fieles, un tarrito de masa madre, de cada bizcocho que hacía, deseándoles salud, amor y prosperidad y así se ha ido propagando a lo largo de los siglos.

Te pasan un tarro de masa madre y sigues las instrucciones. Esta receta se pasa de unos a otros deseando suerte, prosperidad y salud. Su realización es tan sencilla como larga y no se puede hacer trampa, buenooo se puede, pero no se debe jeje.

Yo nunca he estado a favor de las cadenas, detesto toda clase de cadena, mentales y físicas, de hecho, jamás hago ninguna cadena de las que pasan por internet o similares , y sinceramente, prefiero no llamar a ésto cadena, no me gustan las cadenas, yo creo en la libertad, prefiero llamarlo red o proyecto…… pero me picó la curiosidad cuando Marta me dio un vasito de masa,  y leí que no lo puedes tocar hasta el jueves siguiente, momento en el que empieza el largo proceso que dura diez días, y durante el cual no puedes utilizar nevera, ni batidora ni nada del siglo XXI, bueno da un poco de risa, porque estoy utilizando las redes cibernéticas para difundirlo…..y no creo que sea muy ortodoxo. En fin, sigamos, porque nada mas y nada menos que diez días nos llevará hacer este delicioso y misterioso bizcocho pues en todo ese tiempo, a pesar de llevar leche entre sus ingredientes, no va a la nevera, y NO, no se estropea… supongo que como muchas otras cosas, será cuestión de fé…..aunque no exclusivamente, porque tengo entendido, que los ingredientes lo hacen fermentar, como el yogur  y que el azúcar es un gran conservante y ésta masaaaaa lleva abundante azúcar.

Día a día, he ido haciendo y compartiendo con todos vosotros el proceso de la preparación de esta masa especial y hoy ya toca el horneado, por si acabas de entrar aquí y te encuentras con esto, y no sabes el proceso, te lo resumo aquí condensado al máximo;

    1. 1º día: Se vierte el contenido del vaso (masa de arranque) en un cuenco decristal amplio. Se añade un vaso de azúcar y otro de harina sin mezclarse. Se tapa con papel film por ejemplo, y se deja en el lugar de la casa mas fresco. NO se ponen en ningún momento, en el frigorífico.
    2. 2º día: Se mezcla todo con una cuchara, que ha de ser preciso de madera
    3. 3º y 4º día: No se toca.
    4. 5º día: Añades un vaso de azúcar, otro de leche y otro de harina. No se mezcla.
    5. 6º día: Se mezcla todo.
    6. 7º, 8, 9º, día: No se toca.
    7. 10º día: Se aparta masa en tres vasos y se entrega a 3 personas a las que desees salud, suerte y fortuna, junto con la receta para que puedan hacerla.
    8. Ya se procede al horneado del bizcocho 😉

Al final del proceso, y antes de preparar el bizcocho, has de separar 3 partes de masa madre para dar, para regalar u obsequiar a tres personas, a las que les tengas estima y desees lo mejor, y tu te quedas con una cuarta porción que será con la que haces el bizcocho. Cuando te dan este tarro o los das  tu a otros, estás deseando buena suerte y salud a las personas que los reciben, un gesto precioso, por eso también se le llama bizcocho de la suerte o la fortuna, yo más bien creo que se trata de un jercicio de disciplina y dedicación mínima, pienso que es para enseñarnos a compartir con nuestros semejante , no solo en el aspecto material sino en el espiritual y como es una cosa inocente, y que no se hace mal a nadie, aparte de muy bella, pues yo tambien participo ¿porque no?

No se si el Padre Pío existió, ni si las Carmelitas descalzas de Sevilla, lo siguen haciendo, pero como es muy bonito transmitir buenos deseos, creeremos en la leyenda e iniciaremos ésta tanda que quizás en los malos momentos que nos está tocando vivir, sea una manera de crear un poco de esperanza y positividad.

Antes de nada, os tengo que decir que es un bizcocho exquisito y muy pero que muy suave, aparte del componente maravilloso y sentimental, y que nadie de mi família y amigos, hemos tenido ningún problema al comerlo, pesar de haber hecho los 10 pasos en pleno verano a mas de 40º y sin usar la nevera en ningún momento, en ninguna de la muchas ocasiones en que lo he hecho.

Os recomiendo guardar una de la porciones en el congelador, por si en un futuro deseáis volver a realizarlo, yo, por lo menos voy a hacerlo así y quiero recordaros que el paso a paso lo he ido haciendo publicando y compartiendo con todos  en tiempo real, incluso el horneado del bizcocho, así que allá vamos.

Comezaremos removiendo con una cuchara de madera la masa que tenemos preparada en el cuenco y repartiremos en tres vasitos. La cantidad a repartir ,será de lo que quepa en un vaso de agua,de los normalitos, unos 200g aproximadamente, y de ahí ya irá saliendo la preparación posterior. Podéis usar cualquier tarro de ese tamaño aproximadamente, bien de mermelada, fiambrera o cualquier otro recipiente. Yo utilicé en otras ocasiones, estos de una yogurtera antigua que caben justo 200g y son perfectos, pero ojo que no son del tamaño que los yogures que venden, sino mucho mas grandes.

Cualquier tarro con tapa os sirve de hecho, hoy he utilizado unos tarros vacíos y esterilizados de mermelada.

Los obsequiarás, con tus mejores deseos, a tres personas, a las que les tengas estima, y les explicarás los pasos a seguir. En caso de que no los puedas entregar hoy, puedes meterlos en el frigo e indicar a quien los regales, que lo guarden en el congelador y lo saquen al frigo el miércoles anterior al jueves, que hayan elegido para  comenzar a hacer los pasos. Unas horas antes, lo dejarán a temperatura ambiente.

Mientras caliento el horno a 150º abajo y aire (si el vuestro no tiene aire ponéis calor arriba y abajo) con la rejilla a media altura, y con todo cariño…voy preparando los botecitos, ya casi están listos para cerrar….

Necesitaremos;

  1. La masa que nos ha quedado tras apartar las tres porciones
  2. Dos vasos (400g) de harina de trigo o de fuerza
  3. Un vaso (200ml) de aceite de girasol o de oliva suave
  4. Un vaso (200ml) de leche entera
  5. Un vaso de azúcar, yo no pongo porque ya lleva mucho y no me gustan las cosas empalagosas
  6. Dos huevos enteros
  7. Un sobre o 16g de levadura química
  8. Una pizca de sal
  9. Y ahora el resto es opcional, puesto que podéis hacer el bizcocho sin mas…pero yo os recomiendo que pongáis ésto…porque queda maravilloso, aunque esto lo dejo por completo a vuestra eleción 😉
  10. Dos manzanas peladas y troceadas
  11. Un vaso de frutos secos (nueces, pasas, pistachos, avellanas,almendras, etc.), los frutos secos que os gusten, un poco enharinados antes de incorporar a la mezcla para que no se nos vayan al fondo.
  12. Canela en polvo
  13. Gotas de chocolate
  14. La ralladura de la piel de una naranja y un limón
  15. Una cucharadita de azúcar vainillado o la ralladura de una vaina de vainilla
  16.  Todo el amor del mundo, mis mayores deseos de felicidad, paz, amor y salud y con las mejores y mas positivas vibraciones….

Encamisaremos el molde elegido, untando todo el interior con un poco de mantequilla espolvoreamos harina y luevo la volteamos, (en la pila por ejemplo) para eliminar el exceso de harina, mi molde es desmoldable unas veces lo utilizo de 23cm en esta ocasión es de 25cm. Podéis hacerlo en cualquier tipo de molde, redondo, de silicona, cuadrado, un olla Pyrex, una llanda, la bandeja del horno con papel sulfurizado…como queráis, siempre os cuento como lo hago, pero cada cual, a su aire

Separamos los tres tarros para obsequiar, en mi caso, voy a separar uno mas, que voy a dejar en mi congelador, como hago otras veces, para tener masa lista y poder hacer un bizcocho en cuanto pase esto, para mi familia, voy a usar uno de estos vasitos que compro en Mercadona, con tapa de rosca, son pequeñitos, de apenas 1/4 de litro, y  son ideales para estas cosas.

Los ingredientes, como en todos los bizcochos, han de estar a temperatura ambiente.
Primero unimos los ingredientes líquidos, batimos los huevos,
 y el aceite, un vaso, mezclamos bien
incorporamos la leche, un vaso, batimos
y añadimos los ingrediente secos, la sal, el azúcar,(yo no pongo),
la canela,
la ralladura de la piel de naranja y limón (bien lavadas previamente)  (los limones de mi consuegra son espectaculares, gracias Isabel). Ya veis que incluso mis ingredientes, tienen un toque «especial».
la harina, dos vasos
y por último la levadura. La sal y la levadura no se llevan bien, por tanto hay que separarlas y no echarlas nunca juntas. (Esta levadura, es pecial para mi, y mis seguidores, sabréis porque, gracias Sonia y Jose 😉 ) .
vamos mezclando manualmente y añadimos a la masa que hemos estado preparando todos estos días.
una vez las dos masa mezcladas, las volcamos en el molde que tenemos preparado
Por último enharimos (la harina también ha sido un regalo, gracias A ) los frutos secos que hemos decidido poner, esto va al gusto, las nueces también son regalo de mi nuera, que estuve cascando y troceando anoche,
muchas gracias Eva.  Aparte de las nueces, he puesto lágrimas de chocolate puro y pasas sultanas. Alguna vez he puesto trozos de dátiles y también queda delicioso.
pelamos y troceamos las manzanas (que también son regaladas) y las enharinamos, para que no se nos baje todo al fondo y lo incorporamos todo a la masa, junto con un puñadito de pasas sultanas sin hueso
Pelamos y troceamos la manzana en dados y enharinamos, para que no se nos baje al fondo del bizcocho, pero no pongáis mucha harina, solo la imprescindible
Volcamos la manzana sobre la masa y listo para estar en el horno durante 65 minutos, pasados los cuales pincharemos con un palito de madera en el centro del molde, y si sale limpio, apagaremos el horno. No se os ocurra abrir el horno antes de pasados 30/40 minutos, o se os bajará,  hago la prueba del palito de brocheta a los 50/55 minutos, pero ir controlando a través del cristal que no se os queme,  lo he hecho en distintos hornos y no se me ha quemado ni tostado demasiado nunca, pero todo puede ocurrir.
….hasta luego….
Y por fin….
…tras 10 días ¡¡¡se ha materializado el bizcocho!!! y no tiene mala pinta. Al final…han sido 65 minutos de horno, a media altura 150º, calor abajo y con aire, tras apagarlo, lo he dejado dentro del mismo.
Para hacer mas apetecible el bizcocho, lo he «nevado» con un poco de azúcar glas. Con ésto y el azúcar vainillado, ha quedado lo suficientemente dulce para mi gusto.
Mi hijo no acababa de entender que pintaba el libro gordo de Petete en el atril, evidentemente no es ése libro,sino uno muuuy antiguo, regalo de un familar. Simboliza la lectura monacal que hacen los frailes y monjas en los conventos durante las comidas.(Durante las comidas escuchad sin ruido ni porfía lo que, según costumbre, se os lee; y no sea sola la boca la que recibe el alimento…)
A éstas alturas, ya no se si esta receta es de tipo religioso, esotérico ó pagano. Solo os puedo asegurar que es uno de los mejores bizcochos que he podido probar en toda mi vida y como encima va acompañado de buenos deseos…mejor que mejor….
Tiene un sabor especial, es esponjoso , húmedo y que mejorará pasando las horas. Cuando lo hice por primera vez, hace ya mas de siete años,  estaban en casa un poco escépticos con éso de que no se tuviese que meter en el frigo, pero claro…antes no había nevera, ni batidora y fue tal exito que llevo desde entonces, haciéndolo. Tranquilos y recordad que el azúcar es un gran conservante y que los huevos se incorporan a punto de meter al horno para su cocción.
La tradición dice que la masa madre te la tienen que dar y que hay que empezar la elaboración del bizcocho en jueves para que el bizcocho esté listo para el sábado de la semana siguiente. En caso de que no os regalen la masa madre, la podéis crear, comenzado así una serie de buenas intenciones, en el mundo ya hay muuuucha maldad, no cuesta nada intentar alegrarnos unos a otros el día a día deseándonos los mejor ¿no os parece?
Os harán falta;
  1. 1 Vaso de leche entera 200g
  2. 1 Vaso de harina 200g
  3. 1/2 Vaso de azúcar 100g.
  4. 1/2 sobre de levadura en polvo 8g
Mezclamos todos los ingredientes y dejamos reposar durante 24 horas fuera de la nevera. A partir de ahí podemos empezar el proceso de los 10 días.
En cuanto a los tres vasitos de masa madre, podéis regalarlos o si no queréis o no tenéis a quien dárselos, porque comprendo que en pleno confinamiento, es muy difícil, los congeláis para futuros usos. Los descongeláis en el momento elegido e iniciáis los pasos un jueves (para seguir la tradición).
Aquí están mis tres vasitos, que he repartido junto un trozo de bizcocho para la merienda, hoy nueve de Mayo del 2020, ya están con sus destinatarios
Los míos,  han ido a personas muy cercanas, (no han tenido que andar mucho, para recojerlos del pomo de mi
puerta), personas a  quienes tengo mucho que agradecer, y que me están ayudando en los peores momentos, en cuanto al bizcocho, aunque aguanta muy bien el congelado, ésta vez, prefiero compartirlo con los demás. Ah, quería deciros que como cada vez que cocino o preparo algo para compartir, he usado mascarilla, y una vez mas me solidarizo con toda la gente que tienen que ir con ella toda su jornada de trabajo……y mas ¡es horroroso! pero imprescindible, por todos.
Gracias a las nuevas tecnologías, aunque me es imposible regalos a tod@s(como sería mi deseo), un vasito de masa madre…os lo envío de forma virtual, junto con la receta. Si os animáis a hacerla, me encantaría ver la imagen. Si os apetece, la podéis enviar a mi correo electrónico y las publicaré con mucho gusto.
Gracias por leerme, espero que haya sido de vuestro agrado y que si no os da la suerte esperada, al menos disfrutéis de su buen sabor y os ayude a llevar un poquito mejor este confinamiento. Quzás la vida, o la madre naturaleza, nos ha puesto a prueba para que aprendamos una lección, quizás de esta, aprendamos a ser mejores personas, a dar importancia a lo que realmente la tiene, a respetarnos y respetar, a tener empatía y a darnos cuentas de los maravilloso que tenemos la suerte de poder disfrutar, aunque desgraciadamente el precio es TAN alto…..todo mi apoyo a quienes habéis perdido un ser querido a causa de esta pandemia, mi recuerdo y una luz para los que se han ido, que no olvidaremos nunca, y a todos quienes estáis superando el contagio. No perdamos la esperanza, la paciencia, y el amor.
Espero haber hecho un poquito mas amenos estos once días, y mas dulce hoy y los siguientes.
Quizás algún día, en algún lugar alguien reciba un vasito de masa madre, en el que haya una micromilésima parte de ésta que reparto yo, y que váis a repartir vosotros.
BON PROFIT!SED FELICES.Un abrazo de;
iaia Maimen

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