El calaixet en 3ª Liga Oficial Paellas Dacsa de la Comunitat Valenciana

«Refrany; Quan la paella xilla, el socarraet grilla» Cuando la paella grita, el socarraet grilla.

Quiere decir, que cuando oímos crujir el arroz en la paella,(«xilla/grilla») es que el socarraet está en su punto y hay que sacarla enseguida, para que el arroz tenga su punto de dorado/miel y no quemado 😉

Crónica paso a paso de justo, hace cuatro años, que estaba este borrador sin publicar.

Por tercer año consecutivo, arroz Dacsa, realizó (la que de momento es la última, debido al coronavirus), la Liga Oficial Paellas de la Comunitat Valenciana y mi hermano, tuvo la «genial» idea, de que nos apuntáramos.

En un principio me negué en redondo, pero comenzaron hermanos, hijos, nueras, cuñadas, sobrinos y nietas a insistir, es más, hasta mi nieta mayor, me lo pidió como regalo de cumpleaños, pero yo no lo veía… ¿donde iba yo a un concurso de paellas de tal nivel?

Si, es cierto que llevo hechas miles de paellas de leña, perooooo SIEMPRE hechas tête à tête con mi amor, con mi marido, que siempre ha sido el encargado de buscar la leña, prenderla y cuidar el fuego, en los paelleros del monte, en el pueblo, con los Scouts, en los paelleros del apartamento de La Pobla, o en la caseta todooos los sábados y domingos, paellas y fideuás… miles.

Pero siempre él, fue el fogonero, si quito ésta ramita, que si ahora pongo éste tronquito que si soplo, que si aparto… y en la paella de leña, tan importante es el fogonero/a, como el paellero/a. Hace  años que no hacía una paella de leña, la última fue para mi cumpleaños, en el pueblo y para celebrar ese día con mi marido, hijos, nietas y amigos; Lola, Roberto y sus familias y ya entonces me echó una mano mi hijo con el fuego, pero bajo las directrices de mi marido, que ya no podía encargarse por completo del mismo, pero como os digo, de esto hace unos años y me veía incapaz de hacer una paella de leña sin él… sería la primera y buffff, ¡que cuesta arriba! en serio.

Pero vaya, la insistencia fue tal, que no quise defraudarles en su intento por animarme y al final dije SI, pero claro está, con la condición de participar con la única idea de pasar un feliz día en familia, formando equipo para hacer la paella disfrutando, del momento y punto, sin más pretensiones que disfrutar del día «i au cacàu»

Mi hermano se puso manos a la obra, e incluso diseñó unas camisetas con mi nombre para el equipo. Mi nombre es Mari Carmen, pero desde que nací me llamaron Carmensín, para diferenciarme de mi madre que era Carmen, aunque mi tíos Conxeta y Pepe, me rebautizaron desde un principio como Mensi, así fué como me llamaron y me llaman en casa, toda mi familia materna y los amigos de la falla, «Mensi». Al principio chocaba un poco, porque hace ya 66 años, no conocíamos a nadie que se llamara así.

Mi hermano hizo un juego de palabras y éste fue el diseño que hizo, hasta de la camisetas.

Realizamos la inscripción, y a esperar saber si éramos elegidos, ya que  la organización del concurso, eligió mediante sorteo y ante notario, a los 120 equipos que competiríamos y tuvimos la suerte de que nuestro equipo ¡¡¡¡»Mensi Team» fuera uno de los elegidos!!!! .

El siguiente paso fue organizarlo todo. Como los «tres pèus» y todas las paellas las tengo en el pueblo, (en casa tengo varias, pero son pequeñas y para inducción) al final, me la prestaron,(muchas gracias), luego quedó el problema de mi querida Lluna, mi última compañera de vida, ya que bajo ningún concepto podía dejarla sola en casa, porque sufría ansiedad y crisis de separación, y se autolesionaba, y por tal motivo, si no era con ella… no podía salir, ni al médico.

Encontré quien se ofreció a quedarse a Lluna, para poder ir a hacer las compras la víspera, y el día de las paellas, mi querida cuñada que es más una hermana, Cristina, así que ¡gracias cuñi! sin ti, no hubiera sido posible.

Comenzamos el día antes, yendo a por productos frescos de primerísima calidad, al Mercat Central de València.

Primero a comprar «els très péus» o trébedes a la ferretería de Guillermo Pedrós, (en las paradas de fuera del mercat, frente a la iglesia de Los Tres Juanes) que nos recomendó éstas con la amabilidad de siempre.

Antes de comenzar las compras, parada obligatoria en el mismo Mercat Central, «per fer l’esmortzret», sagrado para cualquier valenciano que se precie, cremaet incluído, jajaja.

Una vez con «el cuquet matat», nos dispusimos a hacer las compras cuyo listado ya os puse en la entrada dedicada a la paella a la llenya https://elcalaixetdelaiaia.es/?p=1179 Por desgracia, nos fue imposible encontrar «tabella», sólo habían tenido en dos paradas, pero a primera hora, ya nos les quedaba y os puedo asegurar que nos recorrimos uno por uno, tooodooos los puestos del Mercat Central.

Y llegó el gran día, un soleado y ventosísimo domingo en el que a primera hora, estábamos en el Dacsa Estadium de Almassera, guardando cola para entrar,

recoger el kit consistente en un delantal, para cada miembro del equipo, una cuchara de madera, un paquete de arroz Dacsa, un encendedor de cocina y pastillas de encendido. El resto de ingredientes e utensilios para cocinar las paellas, así como la técnica empleada y la receta según la zona de zona geográfica o tradición, quedaba a la elección de cada equipo, 120 éramos al final los equipos que competimos por alzarnos como los mejores cocineros de paella de la Comunitat Valenciana, en la Liga Dacsa, aunque nosotros solo íbamos a participar y pasarlo bien.

Entramos tras una hora haciendo cola, y se nos asigna un nº, el nuestro fue el 62, así que a buscar nuestro corralito, y a por la leña para prender el fuego, claro está, que los primeros en entrar pudieron elegir la cantidad, el tamaño y grosor de la leña de naranjo

mis hermanos, hijo y sobrinos, tuvieron que ir como locos en busca de cartones para mitigar un poco el horrible viento que hizo ese día y procurar montarnos «la paraeta».

 120 éramos al final los equipos que competimos por alzarnos como los mejores cocineros de paella de la Comunitat Valenciana, en la Liga Dacsa.

Un certamen que puso a prueba el punto de cocción del arroz, el sabor y color de sus platos.

Os pongo algunas fotos de distintos momentos del guiso de la paella.

Incluso, me hicieron unas preguntas,  micrófono en mano, y realizaron una pequeña grabación. ¿Que es la paella para un valenciano?

Aquí os la pongo, ya que eligieron mi imagen y mis palabras para el vídeo

Quedamos entre los finalistas, aunque el premio se lo llevaron nuestros vecinos de «corralito».

Puedo aseguraros que pasamos un día maravilloso y genial, contentos y felices, nuestra paella estaba, en nuestra opinión impresionante, os lo aseguro, punto de cocción, sal, sabor, socarraet, etc. perooo el nivel era altísimo y ya contábamos con ello, así que súper felices de ser finalistas 😉

Aunque no ganamos, nos sentimos ganadores, entre tantísimos participantes, de un nivel muy muy muy alto, chefs, restaurantes y profesionales.

Un día inolvidable, donde el Calaixet de la iaia estuvo presente.

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